Cómo preparar el pay de calabaza tradicional
Un día antes del terremoto estaba sufriendo por una relación que yo misma había decidido terminar. Se los conté junto con una receta de galletas de limón. El martes había quedado de llevarle dichas galletas a unos amigos, aunque primero iba a ir de compras para el café y tenía que entrevistar a varias personas porque estábamos contratando.
Las cosas cambiaron muchísimo a la una y pico de la tarde. Creo que no tiene mucho caso contar todo lo que se me rompió, todo lo que de repente ya no tenía, porque a los dos días me fui con unos amigos y una camioneta llena de víveres a intentar apoyar a gente que realmente perdió todo, y para quien "todo" era menos de lo que yo guardo en un cajón. Fue impresionante sentirme tan inútil, con mis bolsitas de pañales y leche en polvo, a lado de una necesidad y un hambre abrumadoras, y que ya existían antes del temblor.
Es muy fuerte darte cuenta de que todo en tu vida es vanidad: no necesitas nada, nunca lo has necesitado. Te das el lujo de trabajar gratis en la radio, de tener utensilios de cocina de más de siete mil pesos, de haber estudiado arte porque algo dentro de ti siempre supo que jamás te ibas a ensuciar las manos. Algo cambió y no quiero volver a como estaba.
Ahora me siento fuerte porque me doy cuenta de que tampoco necesito el drama. Ni los especieros que se rompieron ni los libros que se maltrataron. Mucho menos que ese vato me quiera con ese amor cojo e incompleto que siempre me ha ofrecido.
Y luego vino el miedo de perder el café, la inversión, los sueños, los años de trabajo, porque simplemente en el centro de Puebla no podía abrir el negocio y cuando se pudo, no estábamos vendiendo nada. La solución me vino, como siempre, en forma de algo que se come: calabazas. Era el momento de meter en la carta productos de temporada.
Aunque nunca se la he preparado, esta receta me recuerda mucho a mi hermana, porque le gustan mucho las calabazas. Se las comparto a ustedes aunque, claro, no olviden que existe la opción de venir a probarlas al Black Cat Bones Café. Muchas gracias a todos los lectores dentro y fuera de México que me contactaron para saber si estaba bien. Estoy bien, pero diferente, y espero que a ustedes el 19 de septiembre los haya sacudido de la misma manera que a mí.
Estoy haciendo con unas amigas un recetario de galletas para recaudar fondos. 100% de las ganancias que resulten irán para esas familias en necesidad que pude conocer. Es la única manera que encuentro para ayudar desde mi fuerte: las recetas. Pronto les avisaré cómo pueden adquirir uno. Mientras, esto.
Ingredientes
- 300 gr de galleta molida
- 130 gr de mantequilla
- 2 huevos
- 1 lata de leche evaporada
- 1 taza de calabaza cruda
- 1 pizca de sal
- 1 1/2 cucharadas de canela en polvo
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- 1 cucharadita de nuez moscada en polvo
- 3/4 de cucharadita de pimienta gorda molida
- 3/4 de cucharadita de clavo molido
Y se cocina así
- Derrite la mantequilla y mézclala con las galletas para formar una masa: cubre con ella el fondo y los lados de un molde profundo para pay
- Licua el resto de los ingredientes y vacíalos en el molde
- Hornea a 200ºC hasta que cuaje y al insertar un palillo al centro, este salga limpio
Acompaña con crema batida.