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Channel: Y POLA COCINA ASÍ
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Todos estaban el día del pastel

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Receta de pastel de kumquats


Ya sé que se sienten abandonados. La verdad es que yo me siento abandonada también. La semana pasada pasaron algunas cosas un poco locas y he estado viendo cómo distraerme emocionalmente. Curiosamente, no he tenido ni las más mínimas ganas de cocinar. 

     Empecemos por el principio: el lunes. Acababa de regresar de Xalapa, me había ido a cubrir el Hay Festival.¿Recuerdan aquel chico de los huevos con machaca? Bueno, creo que no les había mencionado el pequeño detalle de que vive con su novia y esa novia pues no soy yo. Ups. Durante el viaje habíamos hablado mucho, pero el lunes agarré el valor necesario para decirle que gracias pero no gracias. Lo tomó un poco mal (otro ups), y yo también. Así que pasé una semana de muy mal humor. Pero el viernes tenía que animarme: era la fiesta sorpresa de mi primo Jorge y tenía que hacer brownies y disfrazarme de Wonder Woman o algo.

     Cada que hago brownies me acuerdo de Carlos Dexter, y ya no está padre acordarme de él. Lo recuerdo porque una vez, en su cumpleaños, me pidió que llevara brownies y yo los hice "chistosos" pues porque pensé que me hablaba en clave. Llegué con los dichosos a su casa, dónde me abrió la puerta su abuelita. Nunca se me olvida ese episodio tan penoso, ja. El caso es que recordarlo no ayudaba con eso de mi mal humor. Luego descubrí que mi camisa de Wonder Woman me queda grande y terminé de hacer coraje. Respiré profundamente, agarré la charola de brownies y me fui a la fiesta.

     En el camino me encontré a mi hermano. Él también se puso de malas cuando descubrió que seguramente llegaría a la fiesta Diego, mi eterno exwhateverhayasidoeso de la prepa. Yo ya había decidido no enojarme con ninguno de los dos, y después llegaron Agder, el Gallo y el Bebé y me puse muy de buenas porque llevaba años sin verlos juntos. La fiesta estuvo muy bien hasta que de pronto mi prima Karla se puso a llorar en un rincón. Medio me dijo, no muy convincente, que un exnovio le había llamado y le había arruinado el humor. Luego se fue con un amigo suyo de Puebla "por cervezas" y no volvieron.

     Por eso, como media hora más tarde, cuando me llegó un mensaje de un número de Puebla que decía "¿Quieres lanzarte conmigo a Puebla AHORA?" pensé que era Karla ya vuelta loca. Contesté, para hacerla volver, "ven por mí". Pero luego me preguntó dónde estaba y se me acabó el crédito. Tuve que pedir un cel prestado y llamar para rescatar a mi prima de su locura. No era ella, era Carlos Dexter. Como ocho meses después del último "muérete, no vuelvas a buscarme" lo invoqué. Pero esta vez fui fuerte y le colgué, aunque se me arruinó el humor de nuevo y le pedí al Gallo que me acompañara por un taxi.

     En la mañana llegó otro mensaje de Carlos. "Hola". Luego sonó el teléfono. Número desconocido. Contesté de malas. Pero no era ninguno de todos esos idiotas con los que me he metido en los últimos quince años. Era mi amigo Arturo, para anunciar que venía en camino al D.F. Lo acompañé hasta el Foro Sol, porque es hipster e iba al Corona, pero yo me regresé a mi casita a dormir. Tengo que dejar de boicotearme y de escoger tan mal a las personas que me rodean. Y tengo que volver a ponerme a cocinar.

    Tenía estas naranjitas en el refri desde mi último viaje a Pueblo Quieto y decidí inventarme un pastel. Quedó bueno, muy bueno, aunque después de una sola rebanada lo olvidé en una panera hasta que lo tuve que tirar. Siempre me boicoteo, nunca escojo lo que está bueno...

INGREDIENTES

para el topping
  • 2 C de mantequilla
  • 1 taza de kumquats en rodajas y sin semillas
  • 1/4 taza de azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 2 C de vino blanco

para el pastel
  • 1/2 taza de puré de kumquats (licuadas sin semillas, pero con todo y piel)
  • 1/4 de taza de yogur natural
  • 1/2 taza de leche
  • 8 C de mantequilla
  • 3/4 taza de azúcar morena
  • 2 huevos
  • 1 cc de sal marina
  • 1 cc de bicarbonato de sodio
  • 1 cc de polvo para hornear
  • 2 1/4 tazas de harina

Y SE COCINA ASÍ
  1. Primero el topping: en una olla pequeña derrite la mantequilla junto con las rodajas de kumquats, la sal y el azúcar. Remueve durante 7 minutos a fuego lento y agrega el vino al final; reserva
  2. Mezcla el yogur con la leche y el puré de kumquats
  3. En la batidora, bate la mantequilla con el azúcar morena hasta que esponje, luego agrega los huevos uno a uno
  4. Mezcla la harina con el bicarbonato, el polvo para hornear y la sal
  5. Agrega la mezcla de yogur y la de harina a la de mantequilla y huevos, alternándolas
  6. Vierte la mezcla en un molde desmontable para pastel; acomoda encima las naranjitas del topping (reserva el líquido que sobre para el final)
  7. Hornea a 180º C por 50 min o hasta que, al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio
  8. Deja enfriar diez minutos, desmolda y agrega el líquido que haya sobrado del topping
Y de favor, después de tanto desmadre, por lo menos cómanselo, caray :(

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